No son pocas las ocasiones en que me lo consultan, así que he pensado en describir el procedimiento habitual. Imaginemos que un cliente pregunta cuánto cuesta traducir una web del español al inglés. Solemos seguir estos pasos:
- Consultamos al cliente si dispone de los textos en Word o Excel, que es lo ideal. Si no es así, descargamos el sitio web completo con un programa como SiteSucker. En este caso, antes de proceder al análisis, enviamos los archivos descargados al cliente para que compruebe si falta o sobra algo. Con esto se determina el alcance exacto del proyecto evitando sorpresas o malentendidos, para que no traduzcamos ni una palabra de más ni una palabra de menos y el presupuesto corresponda exactamente a lo que necesita el cliente. Si este sugiere traducir la web dentro de un editor de WordPress o empleando un plugin tipo WPML, recomendamos descartar estas opciones, ya que pueden ser incompatibles con el reaprovechamiento de las coincidencias parciales y repeticiones (véase el punto 3), impedir el uso de herramientas de productividad y optimización y causar otros problemas, como exportaciones incompletas, dependencia posterior del plugin para modificar las traducciones cuando se cambien los textos de la web, etc.
- Acordamos el formato de entrega. Si ha enviado los originales en formato editable tipo Word, lo normal es que le sirvan tal cual en inglés y el propio cliente se encargará de generar la versión de su web en este idioma. Si hemos tenido que descargar la web, lo habitual es traducir los archivos html descargados. Las herramientas de asistencia a la traducción suelen omitir las etiquetas en el recuento de palabras y dentro del editor de traducción, así que es fácil generar archivos idénticos en inglés que el cliente podrá subir a su servidor, normalmente cambiándoles el nombre, ajustando los enlaces que apuntan a las páginas traducidas, etc.
- Una vez determinado el alcance del proyecto y el formato de entrega, analizamos los textos para obtener un recuento de palabras desglosado en palabras nuevas, coincidencias parciales (palabras pertenecientes a frases similares) y repeticiones (palabras pertenecientes a frases idénticas). Para las coincidencias parciales, solemos aplicar el 50 % de la tarifa por palabra nueva. Las repeticiones, que normalmente se tarifican a 0,02 €/palabra, en el caso de una web suelen cobrarse a 0,01 € porque a menudo suponen una gran parte del total y su reaprovechamiento es especialmente sencillo y fiable.
- Tras evaluar la dificultad de los textos, decidimos una tarifa por palabra nueva, en función de la cual se aplica una tarifa proporcional para las coincidencias parciales y repeticiones. En más del 90 % de los casos, para las palabras nuevas aplicamos las tarifas generales publicadas aquí: https://www.linguatrans.com/tarifas/.
- Enviamos una propuesta de coste y plazo, en la explico que los traductores trabajan siempre hacia su lengua materna, generando textos no solo impecables, sino fluidos, naturales y atractivos, con un minucioso trabajo terminológico, y que el servicio incluye la revisión por un segundo traductor antes de la entrega.
Espero que estas indicaciones te hayan servido para saber cómo se elabora el presupuesto para determinar cuánto cuesta traducir una web. ¡Me encantaría leer tus dudas, sugerencias o comentarios!